Publicada tras su fallecimiento en 1677, la Ética, una obra organizada en forma de Definiciones, Axiomas, Postulados, Leyes, Proposiciones y Escolios, siguiendo la estructura geométrica, ha sido objeto de diversas interpretaciones a lo largo del tiempo. A pesar de su supuesta objetividad, ha suscitado en la posteridad, no tanto desacuerdos fríos con la verdad de sus afirmaciones, sino emociones poderosas.