Mensaje, el único libro que Pessoa publicó en vida, fue editado en 1934, un año antes de su muerte, y rápidamente ganó cierta popularidad. Sin embargo, cuando sus brillantes obras póstumas fueron descubiertas, este libro quedó algo relegado. En ese momento, era difícil entender que, aunque Mensaje parecía fuera de lugar en el conjunto de la obra de Pessoa, en realidad ocupaba un lugar central (aunque indefinidamente descentrado) en lo que se ha denominado acertadamente como su galaxia poética. Hoy, más de medio siglo después, se puede apreciar que Mensaje no solo une las dos poéticas de Pessoa, la de la Ausencia y la de la Ultra-Presencia, sino que las lleva a sus límites hasta invertirlas. Esto le da a esta epopeya no solo un c
arácter perturbador, sino también paradójico, si es que el poema merece ese título. Para su autor, Mensaje era la proclamación de su sueño más urgente: una patria mítica, fuera del tiempo y el espacio, un Imperio del espíritu y del alma, construido en esta obra dentro del círculo del Mito, y por eso perfecto como el horizonte de todas sus aspiraciones, tanto como poeta del laberinto de la vida como portugués sin otra patria que la evocada en el poema, recordando la antigua gloria, esperando el futuro y su resurrección.