Johann Gottlieb Fichte y la antología de la praxis. Tomo II (Nuevo)

Tras la Revolución Francesa, que simbolizó la audaz lucha de una humanidad en busca de emancipación y reconocimiento como sujeto unitario, el panorama posterior presentó a Fichte un escenario muy distinto. Este nuevo mundo, como se describe en El Estado comercial cerrado y Características de la época actual, revelaba cómo la subjetividad revolucionaria del Yo, que había brillado con heroísmo durante la Revolución, terminó por diluirse en una pérdida de sí mismo. Esta alienación se manifiesta en el dominio del objeto sobre el sujeto, una recaída en el Dogmatismus que prioriza el ser sobre el hacer, el objeto sobre la acción del sujeto. Fichte identifica es te fenómeno como la Anarchie des Handels: un mundo en el que el Yo queda subordinado al No-Yo, donde el intercambio y el comercio adquieren un carácter fetichista, convirtiéndose en "cosas en sí mismas", independientes de la subjetividad humana. En este contexto, el individuo queda reducido a ajustarse pasivamente a esta realidad objetiva (adaequatio). La solución que propone Fichte radica en redescubrir al Yo como actividad (Tätigkeit), aquel principio activo que se manifestó durante la Revolución pero que se perdió en el sistema que le siguió. Solo recuperando esta perspectiva, las relaciones sociales, económicas y jurídicas dejarán de ser vistas como entidades autónomas para ser entendidas como creaciones dinámicas de la acción humana.