El taoísmo, un elemento inseparable del rico legado cultural de China, puede considerarse como una amalgama que abarca folclore, esoterismo, literatura, mitos, leyendas, poesía, arte, filosofía, misticismo, yoga y meditación. Es también un pilar fundamental en la sabiduría perenne. A pesar de esto, existe una opinión generalizada que percibe al taoísmo como una filosofía o un arte de vivir de naturaleza individualista, seguido por aquellos que buscan escapar de una sociedad con la que están insatisfechos. Sin embargo, autores taoístas de la época de los Estados Combatientes (siglos V a III a.C.) estudiaron y reflexionaron sobre problemas políticos. Esta obra perdida, redescubierta recie
ntemente, confirma la teoría de que a principios del siglo II a.C., el pensamiento legalista estaba estrechamente entrelazado con el taoísmo.